lunes, enero 22, 2007

Mi compadre Tello

En ciertos momentos, la felicidad tiene precio. Tello era un joven como cualquier otro que le gustaba comer, despúes de cada comida solía decir: "Barriga llena y sigue creciendo". Él y sus compadres iban a comer en un restaurante muy fino conocido como El Tunel, donde la variedad de alimentos hizo que a Tello lo considerarán obeso.

Tello comenzó una estricta dieta para adelgazar, olvidandose de sus gustos culinarios. Él se esmeraba todos los días para lograr su cometido, hasta que una hermosa mujer, le enseñó que la verdadera belleza se lleva por dentro, despúes de ello, el volvió a ser quien era, porque se dio cuenta que así se sentía mejor.

Con unos gustos particulares en comida, volvió a ir a su restaurante favorito junto a sus compadres, y disfrutó de muchas cosas, como en la música cuyo género preferido era muy particular, pero todo esto lo vivía feliz en compañía de su nueva compañera.

Tello, es bueno tenerte de vuelta

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