En una época de la humanidad, la tierra era habitada por guerreros con técnicas especiales, estos guerreros eran respetados por todos, gracias a que ellos le brindaban a la comunidad protección de las diferentes criaturas.
Pero esa paz no duro mucho ya que los mismo guerreros querían dominar la tierra y pelearon entre sí por el control de la misma. Solo un guerrero logró sobrevivir, y lo hizo gracias a que peleaba por la humanidad, enseñó a sus técnicas para que otra vez hubiese guerreros que pelearan por el bien.
Fundó la escuela conocida como el Taekwondo, en cuyas memorias se nombrán a Peyo de Galeras, su tradición y legado a seguido a travéz de la historia, hasta el día de hoy, donde un joven de la Universidad del Norte sigue ese legado, deseando ser el próximo guerrero legendario.
Peyo, su fortaleza y gran espíritu no será olvidado.
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